lunes, 25 de enero de 2010

Ayer domingo



Ayer fue domingo y después de decir esta perogrullada (es evidente que lo fue) hoy me enfrento al comienzo de una nueva semana que anuncian con frío e incluso con nieve. Me momento, algo han bajado las temperaturas por no da la sensación de que va a volver a nevar y si lo hace, mejor que no sea muy tan fuerte como ocurrió hace unos pocos días. Si ocurre, se volverá a colapsar toda la ciudad y desde el Ayuntamiento, esperemos, no se gestione tan mal la limpieza como la vez anterior y sobre todo que no vuelvan a repetir que la culpa no fue de ellos, la tuvo la nieve, esa genialidad dijeron. Vaya, vaya con la respuesta del Sr. Alcalde y Sr. Concejal encargado de la materia.


Lo mejor del domingo siempre son los sábados y ayer no fue una excepción. Por la mañana nada especial incluidas las ayudas domésticas; al mediodía una escapada a la calle para buscar a algún amigo y tomar un vino en agradable compañía (al final nos vimos y nos tomamos el tradicional blanco de Rueda) arreglamos como hacemos siempre, TODO (el mundo se nos ha quedado pequeño y hemos decidido ir al más allá que también es necesario que lo pongamos en orden) luego un poco de charla de y a casa.

La comida como siempre, nada especial, después un rato somnífero de TV para poder pegar una cabezada en el sofá y pasadas las cuatro, caminos diferentes. Por un lado paseo con las amigas y por otro, camino del fútbol. Café en el campo (es de puchero y me gusta mucho más) saludas a los amigos, compras un tira de números para el sorteo tradicional en los campos modestos de un jamón y a ver cómo juegan los muchachos de tu equipo.

Al descanso, por megafonía dicen los espectadores que hemos asistido, algunos más de 3000 que no está mal para que la categoría del equipo y luego dan el número del jamón, que por supuesto no me ha tocado, aunque una vez ocurrió.

Sigo con interés la segunda parte, aunque más de lo mismo al no ser el partido brillante, empate y pitido final. Bajo el paraguas camino del barrio y durante el camino comentando de las jugadas, las ocasiones y todo lo que rodea a un partido. Siempre es lo mismo

Un vino, por la tarde tinto, en el barrio y a casa, poco más de las ocho. Miras para atrás y ni me lo creo. Siempre me ha gustado estar en la calle, pasear, ir, venir y no hacer nada especial pero de una temporada a esta parte me recojo muy pronto, apenas salgo en coche para nada, salvo los sábados y poco más que contar.

Me asusta por monótona la vida que estoy llevando aunque por otra parte la asumo y la acepto, lo cual es inequívoco síntoma de que no ando muy “sobrao” de ilusiones y expectativas nuevas y me temo que los años que nunca han pasado en balde para nadie, están haciendo mella en mi forma de ser. Queda el consuelo que pronto llegará la primavera y el verano y en esas épocas todo será diferente, distinto y nuevo o al menos en eso quiero creer y esperar.

Y ¿Por qué os cuento estas cosas, sabiendo que no interesan a nadie? Eso mismo me pregunto yo...

Saludos.

4 comentarios:

Elena dice...

Pues te equivocas, Fernando, a mí me interesan estas cosas de lo cotidiano.
Te imagino en el bar charlando, en el campo de fútbol, de regreso a tu casa,...y me gusta imaginarte.
Estamos un "poco" lejos, pero estos relatos de lo cotidiano me acercan a ti.

Yo también llevo una vida muy monótona, pero cuando me sacan de la monotonía, la echo de menos.

Y por Dios, espera un poco, que acabamos de salir del verano, y yo no lo quiero ni en pintura.

Besos.

Fernando dice...

Empiezo por el final, Elena.

Son las doce y media del mediodía de hoy lunes, 25.1.10. Estamos a cuatro grados y todos los pronósticos son que continúa el frío y que nevará por encima de los 300 m. (vivo a más altura). De verdad que aburre el frío. Esta tarde tengo que ir a Burgos que está a casi 1000 m. y supongo que todavía será peor. Sólo espero que no nieve ya que conducir nevando no me gusta nada.

La monotonía me vence, me gana siempre. Me encantaría vivir de tal forma que nunca supiera lo que tengo que hacer o me va a ocurrir al minuto siguiente. Sería estupendo.

Algún día, quien sabe, nos podremos conocer. Me gustaría tener la oportunidad de poder saludarte personalmente.

Gracias por tu visita que agradezco de verdad.

Un abrazo.

Pasión dice...

Fernando, como para que no sepamos que está nevando por esas tierras tan bonitas, algunos telediarios, por no decir la mayoría, dedican veinte minutos al tiempo.

En los países fríos europeos donde están acostumbrados de verdad a la nieve, cada vecino tiene una pala y colabora, je,je.

Esto me recuerda a tu entrada sobre el "chicle" y las basuras que tiramos al suelo. Como yo espere que el Ayuntamiento me limpie la acera de la puerta de mi casa, tengo sentarme en una silla y a esperar, para no cansarme, cualquier día nos encontramos con un cocodrilo, y lo más "gracioso", tenemos en la puerta una papelera, la pobre siempre está vacía, todo se queda en el suelo, incluído cómo no esas cosas que hacen los animalitos.

Cuántas tardes-noches de fútbol en el Sánchez Pizjuán y en el Villamarín con mis hijos. No critico el fútbol, quién lo ha vivido y practicado conocen muchos valores, amistad, disciplina, dolor, alegrías, entre otros.

Hace falta valor para ir a ver un partido donde tú vives, lo digo por el frío. No está nada mal tu Domingo, total para lo que hay que ver. Un abrazo

Fernando dice...

Hola Pasión: Acabo de regresar de Burgos; en la autopista se ven camiones preparados para quitar nieve y echar sal pero de momento no hace falta aunque dicen que llegará. Mañana tengo que ir a Logroño pero en esa zona ya es más difícil que nieve por su baja altitud.

Recuerdo un partido de Copa del Rey, Sevilla-Osasuna fue en Enero en el Sánchez Pizjuan, fui "invitado" por mis amigos "Rambo" y "el Bola" y pasamos todo el frío del mundo. Hacía en el campo 2º y eso en Sevilla es como estar en Siberia, pero aguantamos.

Ayer hacía frío en el fútbol aquí, pero vas bien abrigado, un par de cafés y todo solucionado.

Tengo amigos que han sido futbolistas profesionales pero yo nunca me dio por jugar, siempre he sido un fiel espectador y me gusta ver partidos, aunque solamente encuentro aliciente en los veía al Betis en Sevilla aunque ninguno como ahora ver al equipo de mi pueblo que aunque está en categorías inferiores, es totalmente diferente. Más emotivo.

En cuanto a las limpiezas de las calles como dije en otra ocasión quien ve Villarmentero ve el mundo, igual marranería en todos los sitios e idéntica ineficacia municipal

Un abrazo y hasta la próxima.